En defensa de la escuela pública

Ante los brutales recortes dictados por la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid en el mes de julio, es necesaria la máxima difusión del daño que se le va a hacer a la enseñanza pública. Cerca de 3000 profesores interinos sin empleo, cientos de profesores desplazados, y 1500 funcionarios en expectativa de destino sin plaza asignada (entre los que me encuentro) son las cifras del desmantelamiento de la pública.
Estos recortes afectan principalmente a estos profesores y a sus familias, pero también a los alumnos, padres,madres y familias que confían en la enseñanza pública. Dejará de haber personal del departamento de orientación, desdobles, agrupamientos flexibles, compensación educativa, atención a la diversidad y muchas otras banderas de la escuela pública y de su modelo educativo integrador. La tutoría de grupo, eliminada ilegalmente del horario lectivo, pasa a un indefinido aún modelo personalizado. Cuando cortinas de humo como la excelencia, el bilingüismo y la libertad de elección copan los grandes medios, especialmente los públicos de Madrid, resulta necesario explicar la verdad de la enseñanza desde dentro, desde los que sufrimos a unos gobernantes que no saben lo que es la escuela.
El ataque a la enseñanza pública exige la unidad de profesorado, familias y alumnado en las movilizaciones que se llevarán a cabo en septiembre y que ya comienzan a prepararse en asambleas, institutos, sindicatos y en las redes sociales (#profesoresinesperanza es uno de los hashtag más difundidos estas semanas). Ojalá que entre todos podamos defender la escuela pública, la de tod@s, para tod@s