Abderramán I, el primer refugiado sirio en la península.

Desde hace años ya, miles de sirios buscan desesperadamente un salida hacía Europa, huyendo de la guerra civil y de la situación provocada por el auge del mal llamado califato islámico (no estaría de más hablar  aquí de la responsabilidad de la política exterior de los EEUU en este tema armando a los supuestos "rebeldes").
 Son los llamados refugiados sirios, muchos de ellos ya en nuestro país. La relación con Siria no es nueva, ni mucho menos, y sin embargo es poco conocida.

Allá por el año 755, en plena edad media, llegó a Almuñécar el que podríamos llamar primer refugiado sirio, Abderramán, Abderramán I o Abd al-Rahmán I al-Dājil (الداخل, ‘el que entra’ o ‘el inmigrado’) nació en Damasco en marzo de 731 y era un príncipe de la familia omeya, gobernante en el Islam desde los tiempos posteriores a la muerte de Mahoma hasta el año 750. En ese año, otra familia árabe, los abasidas se hacen con el poder, y tras eliminar a toda la familia omeya en un banquete,una autentica carnicería de la que solamente escapó Abderramán, junto con su hermano Yahya (que murió en la huída). En un ambiente de guerra civil, facciones y bandos enfrentados (muy similares a la actualidad). Abderramán llegó al norte de África y cruzó el estrecho, llegando a Al-Ándalus. Allí se encontró en clara desventaja frente al emir Yusuf, pese a lo cual supo articular un ejército y derrotarle, entrando victorioso en Córdoba. Pese a ello, el ambiente de enfrentamientos civiles del que huyó en Siria y en oriente se reproducía en la península. Sirios,yemeníes, bereberes, mozárabes, muladíes...las facciones y grupos rivales hacían de Al-Ándalus un auténtico polvorín. Abderramán lucho toda su vida por pacificar el territorio y obtuvo numerosas victorias, pese a lo cual la inestabilidad siguió dominando el siglo. Fortaleció el ejército, la administración, y se proclamó emir independiente de Bagdad (sede del califato abasida).Luchó contra los cristianos del norte, a los que sometió, y también inició la construcción de la mezquita de Córdaba , en lo personal se casó con una antigua esclava visigoda convertida al Islam, de la que nacería el futuro emir Hisham I.

Refugiado, príncipe legítimo, Abderramán es una figura clave para entender la historia de España, con él se iniciará el período de máximo esplendor de la cultura hispano-musulmana que culminará con el califato en el siglo X (con otro Abderramán, el III). Y sin embargo en sus orígenes no fue más que un joven de 20 años que huía del asesinato, la persecución y la guerra civil. Exactamente como ocurre hoy, en 2015. Por todo ello "Bienvenidos refugiados"