Cartel diseñado para el PCE por el diseñador gráfico Paco Arnau
Un 25 de abril de hace 40 años, y con la señal de la inolvidable canción de Xosé Afonso Grândola, Vila Morena el pueblo portugués, a través de los famosos capitanes del ejército derrocaban pacíficamente a una dictadura de más de 50 años que desde Oliveria Salazar a Caetano oprimió a nuestros vecinos ibéricos, al igual que ocurría en España con la dictadura franquista. La simbología de los fusiles con claveles y las imágenes de aquella revolución pacífica animarían y contagiarían al pueblo español, en los estertores de un franquismo que pese a todo, terminó con una transición o transacción (recordemos que todo estaba "atado y bien atado" en palabras de Franco). Pese a los sinsabores y a las decepciones de aquellos años posteriores a la caída de los fascismos en la península, fue un momento de ilusión, de lucha, de hermandad ibérica, un proyecto nunca olvidado por algunos entre los que me encuentro. En un momento de nacionalismos de todo tipo, es obligado recordar los paralelismos de la historia de Portugal y España, tan lejos y tan cerca. Confiemos en que la nueva dictadura que vivimos portugueses y españoles, la de la troika y el capital financiero, consiga unir a pueblos hermanos. 25 de abril sempre!
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